Había una vez una chica llamada Flúor, pertenecía a la familia de los Halógenos, ella se enamoró de Nitrógeno, un chico que fue adoptado por la familia de los gases nobles, por desgracia estas familias no podían reaccionar o como vulgarmente decimos no se podían juntar.
Un día se reunieron varios elementos en un Laboratorio para el matrimonio arreglado entre la joven Flúor y el pelele de Uranio para que formasen el hexafluoruro de uranio y obtener el combustible de los reactores nucleares.
Al enterarse Nitrógeno de semejante atrocidad decidió ir a detenerlos ya que el sentía lo mismo por Flúor pero el mejor amigo de Nitrógeno: Kriptón trato de explicarle que ese amor no podía funcionar, pero al parecer nuestro galán tenía la cabeza llena de Helio y no hizo caso. De camino al laboratorio Nitrógeno se encuentra con Yodo el primo de Flúor, se hacen de palabras y después sostienen una dura pelea en dónde por desgracia yodo muere y Nitrógeno es desterrado de la tabla periódica por Hidrógeno el número 1.
Mientras tanto Flúor aún no se resignaba a su nefasto destino por lo que le pidió ayuda al sacerdote Carbono, el cuál decidió explicarle como podía cristalizarse temporalmente para retrazar la boda hasta que Nitrógeno pudiese regresar.
A los días, el padre Carbono trato de comunicarse con Nitrógeno para decirle que Flúor lo esperaba, pero no recibió el mensaje, sin embargo si recibió la noticia de que Flúor se había cristalizado.
Nitrógeno sin importarle los mandatos de Hidrógeno decidió regresar a la tabla periódica para permanecer al lado de Flúor para siempre, pero antes decidió ir a ver a un químico para que lo convirtiera en Nitrógeno líquido y poder cristalizarse al igual que Flúor.
Después de llegar a su destino final, la contempla por un tiempo en silencio y se cristaliza al igual que todo lo que esta alrededor, al despertar Flúor de su cristalización vio a Nitrógeno y al darle un beso provoco una reacción en cadena, la cuál hizo que los dos se desintegraran en partículas.
Al ver todo terminado Hidrógeno habló con las familias de estos jóvenes para que reflexionaran sobre esto, pero hasta ahora el Flúor y el Nitrógeno no se pueden juntar.
Así que nunca hubo una historia tan química como la de Flúor y su Nitrógeno.
